Los mayas eran grandes astrónomos y su cosmovisión al igual que muchas otras se basaban en la observación de estrellas y de la naturaleza, comprendían una visión integral entre el cosmos, la tierra y nosotros. Cada persona venía a este mundo con un Don o un regalo que le permitiría lograr su misión y propósito en esta vida; sin embargo, para lograrlo tendría que aprender de su luz y su oscuridad, de su “equilibrio”. Como toda maestría de vida, el regalo no es gratuito a medida que aprendes a vivir en la atención y observación de tu comportamiento, comprendes que tanto la luz como la oscuridad viven en ti sin embargo eres capaz de integrarte, aceptar sin juicio de valor, lo que eres y cómo viviendo desde tu Don despierto o desde su luz puedes vivir con propósito; nada es bueno o malo, solo “es” por lo que el nivel de concientización de esta filosofía está dotada de un pragmatismo muy grande y también de una practicidad que no deja de sorprenderme todos los días.
Es curioso, pero empecé mis estudios de nagualismo con Enzo Arias en Chile, gran maestro y filósofo a quien admiro mucho; gracias a él descubrí las herramientas del oráculo maya y la trecena, derivados del calendario solar TZOLKIN o calendario solar, que comprende 20 “naguales” o “Kin” maya, cada persona tiene uno que le rige, un oráculo de ayuda y una trecena que es una hoja de ruta para finalmente trascender. Es curioso, la vida y el destino me llevaron a radicar en la Riviera Maya y mientras más conozco de la cultura de esta región más sentido me hace su sabiduría.
El oráculo maya para mí es una matriz, una especie de brújula de energías que te llevan a analizar ese Don con el que cumplirás tu misión, la energía que te da el coraje para realizarlo, la energía que te guía a conectarte con ese propósito, la energía que menos usas y que más te cuesta adaptar pero que es muy útil pues es un desafío que te hace crecer y la energía que está oculta, aquella que por alguna razón aún no reconoces. Al interiorizarme con ello, lo trabajé desde la mirada del coaching y di paso a crear un programa que llamo “La Matriz Maya” donde a través de estos “comandos energéticos” que obedecen al manejo de comportamiento y la acción; podremos plantearnos una forma de empezar a hacernos las preguntas necesarias con las que lograrás vivir desde tu propósito en observación contante y en equilibrio con tu luz y tu sombra.
Si te parece interesante esto como metodología para desarrollarte ¡imagínate a mi que fue una fuente de inspiración para mis coachees! Con amor VO