La terapia y el coaching son dos cosas distintas sin embargo ayudaría mucho que les consideremos dentro de las organizaciones para apoyar los programas de bienestar, mejor conocidos como “wellbeing”

Permítanme ponerlos en antecedentes,  gracias a la pandemia la salud mental comenzó a hacerse notar como una necesidad importante que atender; según la OMS, en la pandemia la ansiedad y la  depresión aumento en un 25% y señala que crecieron más entre las mujeres y los jóvenes; sin embargo, ya han pasado 4 años de la pandemia y las enfermedades mentales crecieron más entre los jóvenes que en los adultos,  lo que me lleva a pensar que el cúmulo de información que consumimos hace que cada vez más seamos una sociedad mucho más consciente de nuestra salud mental pero mucho más imprudente en el auto diagnosticarnos y recurrir al consumo desmedido de contenidos en las redes de falsos gurús y sus “soluciones” o bien;  el consumo de drogas que abanderado de una “búsqueda espiritual”  más que un camino de autoconocimiento se ha convertido en momentos de evasión de lo que la realidad atañe;  en cualquiera de los casos existe la ausencia de un especialista que pueda apoyar a la persona a trabajar con lo que le pasa.

Pero ¿Cuáles son las situaciones de salud mental que más atañen a la sociedad actual dentro de las organizaciones?  “La patología de la vida corriente” del modo que definiría la Dra. Marian Rojas. Son síntomas que están surgiendo cada vez más frecuentes en nuestra sociedad y que no todos están gestionando de la mejor forma, los síntomas que provocan son la ansiedad, depresión, insomnio, algunas vías de escape como adicciones, insatisfacción de la vida, sensación de vacío, agotamiento y frustración.

Sumado a lo anterior y a el crecimiento de estos síntomas en la juventud cito parte del artículo del filósofo Carlos Javier González Serrano que comenta: “Podría parecer paradójico que, precisamente, en una sociedad en la que se nos insta sin descanso a perseguir el deleite y la felicidad lleguemos a padecer su total ausencia.” El homo consumens acaba consumido por el consumo.

El consumo inconsciente de modelos de felicidad pre fabricadas en las redes sociales sumará que esta bola de nieve se haga más grande y dado que el consumo es individual y no depende de la organización pareciera que son acontecimientos que no tuvieran correspondencia alguna pero sí, las organizaciones precisan de colaboradores cada vez más multitask a los que se les exige cada vez más por el acceso a la información y una conducta autodidacta;  pero son esos mismos los que han perdido esta conexión con el propósito y este sentido que pueda movilizarles a una misión en la vida; por lo que el mundo del pensamiento y la introspección se va reduciendo hasta que llega la crisis, es decir;  los síntomas que como bien define Rojas son “La patología de la vida corriente”

Pero no me malinterpretes, no veo un mundo de sombras sino de grandes oportunidades que nos puede ofrecer visualizar organizaciones más comprometidas con personas que experimenten balance. Me gustaría mencionar por ejemplo algunos tipos de coaching según su tipo de escuelas para poder ayudar a gestionarnos.

La ansiedad, el agotamiento y la frustración se pueden apoyar en un modelo que le permite al coachee identificar o aclarar lo que expresa, permitiendo poner el foco en lo más importante. La claridad en las personas ofrece un alto nivel de bienestar.

Los modelos de coaching como en la escuela europea del que unos de sus precursores es Timothy Gallwey y su sistema de aprendizaje denominado “El juego interior del tenis”, aporta un avance en nuestro propio juego mental, para esta escuela es primordial que un coach sea capaz de ver a las personas no como son, sino cómo pueden llegar a ser; basándose en 3 conceptos básicos:

1.- Elevar la conciencia

2.- Asumir la responsabilidad

3.- Desarrollarla confianza en uno mismo

La espiritualidad y el ser personas que manifiesten fe es un factor que ayuda mucho en momentos difíciles y  desafiantes, sin embargo;   no siempre las personas ejercen el ejercicio de la fe y este vacío interior puede tornarse aterrador,  aparece cuando tu momento de  vida esta carente de propósito,  va más allá de ganar dinero en el trabajo o haber obtenido el cargo de CEO, a veces paradójicamente son momentos de éxito con un gran un vacío interior; en ocasiones las personas piensan que tienen todo para ser felices pero no lo son. Aquí la terapia floral y la terapia psicológica puede ser de una ayuda magnifica en un trabajo integral que aporte la escucha, el desahogo y el tratamiento natural para equilibrar vibracional-mente a la persona.

Aquellos líderes que dudan de su liderazgo por situaciones que escapan a sus principios o valores o a circunstancias ajenas a ellos; suelen tragar y contenerse demasiado, llegan a plantearse en muchas oportunidades qué tipo de persona es, como le gustaría pasar por su historia como líder de una organización o de determinado equipo,  contener a la persona a través de sesiones de coaching mejorarían exponencialmente el foco en integrar esas preguntas que nunca se hicieron; sobre lo que amamos, queremos, o creemos. Escuelas como las del coaching ontológico basado en la filosofía y la lingüística, ayudaría a la persona a iniciar un discurso distinto como su postulado que dice que “Los seres humanos se crean a sí mismos en el lenguaje y a través de él”.

¿Pero todo esto puede parecer demasiado arriesgado? ¿Las organizaciones no quieren poner al alcance de sus colaboradores a este tipo de especialistas? O quizá ¿Seguimos pensando que la “patología de la vida corriente” es responsabilidad del individuo únicamente?

Resulta que no, existen empresas que ya están implementando ciertas actividades que van directamente a mejorar el bienestar de sus colaboradores, aquí te dejo algunos ejemplos, esperando que esto pueda ser punta de lanza para iniciar el verdadero cambio de paradigma que es pensar integral y generar culturas organizacionales que apunten a una inteligencia colaborativa basados en la premisa de mejorar la humanidad de su organización.

Por ello el cambio de paradigma no es solo integrar programas sino pensar integralmente.

Espero que esto sea de utilidad y un aporte a conocer otras herramientas para gestionar y gestionarse.

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Con amor VO